El objetivo es tener una relación directa con los contenidos que los niños y niñas trabajan en el aula y aprender más sobre ellos en el comedor mediante una experiencia práctica y significativa. Por un lado, proponemos reflejar en el comedor los países, costumbres y culturas que se están trabajando en clase. De esta manera, se creará una conexión natural entre las lecciones del aula y el comedor diario. Por otro lado, teniendo en cuenta la diversidad cultural de la Ikastola, los alimentos de los países de origen del alumnado también se incluirán en el menú del comedor. Cada mes, por lo tanto, se ofrecerán en el comedor la decoración propia del país o la cultura elegida, pequeñas informaciones, datos curiosos y un menú temático adaptado. Con este proyecto, los niños y niñas podrán ver, probar y vivir en el comedor lo aprendido en clase y el aprendizaje se hará más significativo.